Bueno,
empezar diciendo que el año pasado con 20 kilos menos la hice genial, pero este
año sin entrenar y muy pasado de kilos, etc. Se me hizo un infierno de 11 h. 35.
Ya
el inicio, cuestón enorme, me dejo tocado pero no fue hasta el kilómetro 49
donde me acalambré y donde ya eché manos
del bendito réflex, ojú: aun quedaban 120 kilómetros
y ya estaba listo de papeles¡¡¡¡
Seguí
sufriendo, siempre en busca del siguiente avituallamiento: casa de los
cristales, fuente la corcha y cuando llegue al kilómetro 101 medio muerto pensé
va cojones lo mas duro ya paso ahora a rodar y....
Y
nada, el llano con los toboganes se hizo muy duro por el viento de cara y
cuando creí que iba a mejorar: zasca¡¡¡ cambio respecto al año pasado pegado a
un río con sus subidas (ya a patas todas) ni el réflex me aliviaba los
calambres y el dolor cervical.
Pasamos
a los últimos 20
kilómetros , que llegué a emocionarme varias veces por
que la arena blanda del pinar me remato, pensé que me daría algo del sobre
esfuerzo y solo pensando en mi familia y amigos; tuve los coj... de seguir como
bien pude, con rozaduras en el pompis, brazos rotos de dolor, cervicales ardiendo
y fatiga pero aleluya¡¡¡¡ llegue a META.
La
verdad, que lo que pase no se puede explicar con palabras, pero los espartanos
y espartanas que la hicieron me comprenderán muy bien.
Sin
más, hasta el año que viene esperemos estar mejor físicamente y no despedirme
sin dar las gracias a los voluntarios que hacen esto posible y dan tantos
ánimos. Chapo a la organización, este año un 10.
Rafael Rodríguez de
la concepción dorsal 951